Mi teoría

Hace unos cuantos meses, cuando decidí escribir un blog, mi planteamiento fue hacerlo sobre temas positivos, un poco en contraposición a lo que habitualmente se lee en muchos sitios. Se puede constatar que ha habido un vacío de meses, probablemente por la falta de argumentos. Y efectivamente, la casi ausencia total de noticias positivas hace que sea prácticamente imposible llevar a cabo tal fin. Pidiendo disculpas de antemano, hoy me sumaré a esa marea de visiones un poco catastrofistas sobre la situación actual ya que, algunas conversaciones que he mantenido últimamente me han llevado a formular internamente una teoría sobre lo que está ocurriendo, por qué está ocurriendo y a dónde nos quieren llevar. Por supuesto, es solo una visión probablemente muy sesgada y falta de argumentos y documentación, pero lo bueno de Internet es que cada uno es libre para escribir lo que desee y a su vez para leer lo que estime oportuno.

Cuando vemos que día tras día no se producen más que malas noticias en el aspecto económico, que los mercados nos castigan, los políticos se ven arrastrados a tomar unas medidas que aparentemente no les gustan y hagamos lo que hagamos, no somos capaces de salir del pozo, cuando menos, no hacen más que asaltarle a uno las dudas. ¿Cómo puede ser que ninguna de las medidas dé frutos y que, a pesar de ello, se siga actuando una y otra vez de la misma manera? Ya decía el sabio que, si no quieres obtener los mismos resultados, no hagas una y otra vez lo mismo. Pues bien, creo que esto es lo que demuestra que, efectivamente, están consiguiendo lo que persiguen. Si no, no tendría ningún sentido que vapuleasen a la población continuamente con más impuestos, rebajas de salarios y condiciones de vida más duras.

Hablo de que están consiguiendo lo que buscan. Entonces ¿Qué es lo que buscan? Según mi propia opinión, ojalá que equivocada, el único objetivo de las autoridades europeas es depauperar a la población de los países periféricos, es decir, Irlanda, Grecia, Italia, Portugal y España básicamente. ¿Por qué se quiere hacer esto? Pues por razones puramente económicas y comerciales. La mayoría de las empresas han deslocalizado la producción de sus productos hacia países donde la mano de obra es más barata, sobre todo países asiáticos. Hoy en día sale más barato fletar barcos con enormes cantidades de productos desde países como China porque el precio de la mano de obra compensa los costes de transporte, cosa que en términos medioambientales resulta desastroso, pero eso es otro debate a abrir en otro momento. El inconveniente surge porque esas economías crecen a ritmos increíbles y sus habitantes empiezan a cansarse de largas jornadas de trabajo por sueldos irrisorios.

Como esto va a suponer un problema a medio plazo, la solución más sencilla es ir preparando el terreno para buscar nuevos lugares donde producir a unos precios razonables y si además están cerca y podemos controlar la  producción a través de la política, pues mucho mejor. Por lo tanto, si poco a poco vamos empobreciendo a la población de los países periféricos de Europa, la gente irá entrando en un estado de desesperación, pasarán hambre y clamarán por tener cualquier tipo de trabajo a cualquier precio. Y entonces será el momento perfecto para establecer en dichos países fábricas de marcas europeas y así poder contratar a sus operarios con contratos infames ya que, con tal de tener un trabajo harán lo que sea necesario. Por supuesto, cuanta peor educación tengan y menos críticos puedan mostrarse con dichas condiciones, mejor. Todos nos alegramos por el anuncio de que la producción mundial de Aspirina se va a concentrar en Langreo (Asturias). Qué curioso que la empresa productora (Bayer) sea alemana y le dé ahora por fabricar en España ¿No es sospechoso?

Con todo esto lo único que quiero decir es que nada es casual, ni los malvados mercados van a por nosotros. Son los grandes lobbys financieros que con la connivencia de nuestras autoridades están siguiendo un plan para ganar cada día más dinero sin pensar en las consecuencias humanas que ello conlleva. Sin querer pasarme de la raya, no me parece muy diferente esta especie de genocidio económico que están llevando a cabo del que se produjo hacia mediados del siglo XX en centro Europa. Sé que estas palabras suenan muy gruesas, pero son fruto del cabreo que me produce que nos tomen por idiotas gente que no tiene escrúpulos y que han llegado a donde están gracias a la ausencia de los mismos. Todo esto no hace más que conducir a una tremenda desazón porque demuestra la enorme estupidez de la especie humana, que probablemente es la menos inteligente que puebla la tierra, ya que ni unos ni otros somos capaces de arrinconar y destruir a esa minoría que nos somete en nombre del invento más absurdo que ha tenido jamás la humanidad: EL DINERO

RMR